Capítulo 3
Lola se agachó para
levantarse las medias y atarse fuerte los cordones. Yo voy a buscar a
Brenda, dijo, y vos, señalando a Lucas, me vas a sostener el pie.
¿Qué vas a hacer ? Preguntó Chiara. Me voy a poner de cabeza en el
pozo. ¡Ah! Yo traje mi soga de saltar, dijo Melanie y yo tengo una
linterna que metí en la mochila, agregó Maia.
Muy bien todo sirve pero
tenemos que apurarnos porque esto se está complicando, dijo Levi.
Eze, dijo Lola¿Me das un
poco de chipá por si lo necesito? Ezequiel sacó un puñado de chipá
de su bolsa y se los puso en el bolsillo de la campera.
Lola hizo una mortal y
Lucas buscó el pie para agarrarlo en el aire. ¡Qué bueno! Decía
Brisa mientras le sacaba fotos.¡Parece “Misión Imposible”!.
Lola mirando adentro del pozo, abrió grandes los ojos. Lucas se
ponía colorado por el esfuerzo. Melanie buscó a Francisca y a Belén
para que la ayudaran a sostener la soga. ¡Ahi va! Gritó Melanie y
la manija de la soga le pegó a Lola en la cabeza.¡Auch! Se quejó.
Auch, auch, auch repitió algo.¡Soltame despacito, Lucas!
Cito Lucas, cito Lucas,
Lucas, se escuchó.
Una vez que Lucas soltó
el pie, Lola fue descendiendo por la soga hasta llegar al fondo.
¡Brenda!Llamó ¿Brenda?
Lola sacó la linterna del
bolsillo y cuando la encendió vio con sorpresa que un hueco abría
un camino largo y oscuro.¿Y Brenda? ¿¿Y Lola??Preguntaron un
montón de chicos asomados por el pozo. No está, les dijo Lola. Pero
yo la vi caer, aseguraron Isaías y Franco al mismo tiempo.
Acá hay un camino pero
está muuuuuy oscuro.
Mientras tanto...
Félix había decidido ir
a buscar la tapita que parecía un ratito antes tan cerca de
alcanzarla. Mica, Almendra y Morena corrían con Chiara detrás de
Félix, esquivando gente y carteles. Llegaron hasta la puerta de la
Casa Rosada. La presidenta les sonríe pensando que el apuro de los
chicos era por llegar a saludarla y mientras se inclina para darles
un beso dice: Romualdo guardá la botellita por favor.¡Nooooooooo!
Grita Félix, pero ya era tarde. El hombre que tenía en sus manos la
botella con la tapita rayada era el mismísimo Romualdo Tapón, el
archi enemigo del Señor de las Tapitas. Mientras la presidenta
invitaba a los chicos a pasar a la Casa, Romualdo guardaba la botella
y le cambiaba la tapita rayada por otra.
¡Ahhh, ja,ja,ja! Le
escucharon decir.¡My precious!agregó y se guardó la tapita en un
bolsillo.
Los chicos se miraron
decepcionados, pero igual entraron a la Casa.
¿Adónde llevará el
túnel que descubrió Lola? ¿Encontrarán a Brenda? ¿Qué hace
Romualdo Tapón en la Casa Rosada?
No te pierdas el cuarto
capítulo de....”Las aventuras de los chicos de segundo”
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